El pulso soberanista en cataluña

 

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Miércoles, 28 de octubre del 2015 - 22.08 h
Ciutadans, PSC y PPC se han apuntado un tanto al conseguir que el Parlament ralentice la tramitación de la resolución de Junts pel Sí y la CUP que abre el camino de la ruptura de Catalunya con España. Sin embargo, aún está por ver si lograrán su objetivo de impedir que la declaración se vote antes del simbólico 9-N, fecha de la primera votación de investidura del nuevo 'president'. Aplicando estrictamente el reglamento de la Cámara sería imposible, pero los grupos soberanistas podrían forzar ciertas interpretaciones de ese reglamento para salvar su plan. A priori, el calendario y los procedimientos serían los siguientes:

PETICIÓN DE RECONSIDERACIÓN

Una vez admitidas las peticiones de reconsideración de Ciutadans y el PSC --admisión que no se ha votado porque es automática--, la Mesa del Parlament dispone de cuatro días para resolver sobre ellas, pero debe reunir primero a la junta de portavoces para escuchar las posiciones de los grupos.

JUNTA DE PORTAVOCES

La junta de portavoces no se puede reunir hasta que todos los grupos parlamentarios estén constituidos. El PPC es el único que no lo está y tiene hasta el viernes 6 de noviembre a las 9:30 horas para hacerlo y designar un portavoz. Pese a ello, fuentes de Junts pel Sí en la Mesa dejan entrever que sería posible reunir a la junta de portavoces aunque los populares no estén constituidos como grupo. Podrían participar como invitados --al igual que ocurre en las reuniones de la Mesa-- o con un portavoz provisional. Sin embargo, otras fuentes de la misma Mesa aseguran que el reglamento no contempla ninguna de estas excepcionalidades y, por tanto, solo cabe esperar a que el PPC nombre un portavoz.

6 DE NOVIEMBRE, DÍA CLAVE

Si el PPC decide apurar al máximo el plazo para constituirse como grupo, este trámite se formalizaría el 6 de noviembre a las 9:30 horas. Ese mismo día podría reunirse la junta de portavoces para debatir las peticiones de reconsideración de la resolución secesionista. La mayoría de Junts pel Sí y la CUP las tumbaría y entonces la Mesa, que se reuniría también el viernes 6, aprobaría seguir adelante con la tramitación de la declaración por vía de urgencia.

PERIODO DE ENMIENDAS

Levantada la suspensión temporal, los grupos dispondrían de dos días hábiles para presentar enmiendas al texto. Esos dos días hábiles serían el mismo viernes 6 de noviembre y el lunes 9, día de la primera votación de investidura. Con ello, la resolución no podría votarse hasta el martes 10 de noviembre.

SÁBADO, ¿DÍA HÁBIL?

Pero las versiones en la Mesa también difieren en otro punto. Fuentes de Junts pel Sí creen que, previo acuerdo del órgano rector del Parlament, podría habilitarse el sábado 7 de noviembre como día de presentación de enmiendas, a pesar de que nunca antes la Cámara ha considerado un sábado como día hábil. Si la Mesa, donde Junts pel Sí ostenta la mayoría, aceptase esta nueva excepcionalidad, entonces el periodo de enmiendas expiraría el sábado 7 y, por lo tanto, la resolución sí podría votarse el lunes 9, antes o después de la sesión de investidura.